Rejuvenecimiento vaginal
El tratamiento de rejuvenecimiento vaginal es también conocido en cirugía como vaginoplastía. Puede ser, ciertamente, estético pero también funcional pues permite recuperar la tonificación y firmeza de los músculos vaginales.
Esta intervención es realizada con anestesia general, con una duración mayor a 1 hora promedio, dependiendo, claro, de cada paciente. El tiempo de recuperación, tras la intervención, puede ser de un mes y, en dicho lapso, evitará tener relaciones de pareja durante unas ocho semanas o más, de acuerdo con la prescripción médica. Asimismo, recomendamos a las pacientes que deseen intervenirse, no querer tener más hijos en el futuro ya que el parto podría afectar y deteriorar los resultados obtenidos.

Información del tratamiento
Beneficios
- Ayuda a recuperar y mejorar su autoestima.
- Podrá disfrutar la relación sexual más satisfactoriamente.
- Permitirá una mejor funcionalidad y apariencia más estética.
- Será de fácil y rápida recuperación.

Resultados esperados y riesgos
Al ser una operación de escasos riesgos, los resultados serán permanentes. Además, se podrá apreciar la mejoría en los labios vaginales y su mejorada funcionalidad que le permitirá sentir más placenteras las relaciones con su pareja. Los riesgos más usuales podrían ser la fiebre, infección, inflamación, sangrado o algo de dolor.
La intervención
Se procederá a realizar una incisión en la zona intermedia entre la vagina y el ano; por dicho corte se eliminará el exceso de tejidos y piel, tensándola. El cirujano plástico se dedicará a estrechar el órgano vaginal, suprimiéndole flacidez, ocasionada por el paso de la edad o los partos.

Cuidados tras la intervención
Deberá tomar unas 2 o 3 semanas de reposo por indicación del médico, lo que permitirá una fácil recuperación. Posteriormente, podrá retornar a sus actividades regulares pero deberá evitar los movimientos bruscos y no mantener relaciones íntimas por un plazo no menor de 30 días.

Contraindicaciones
No realizar esta intervención en mujeres en estado gestante o lactante. También se aplica la contraindicación a las personas que padecen enfermedades de tipo cardiovascular, sistémico o autoinmune, o con deficiente coagulación o cicatrización.